Sabes a mañana con leche de chocolate. Tienes el aroma de los cuentos recién dichos. Sabes a primavera, a juventud eterna. Te pierdes entre el rocío de mis propias plegarias. Para reaparecer en mis mejores sueños.
Despierto contenta de saber que no solo existes en mi delirio, sino que estás a mí lado, al alcance de mis dedos ansiosos que siempre quieren tocarte.
Que precioso amorchiiiiiii.
ResponderEliminarun verdadero honor ser parte de tu inspiración ^^
ojalá éste no sea el ultimo relato, quiero mas!
Te sigo, yo también :)
ResponderEliminarUn besitoo
Corto pero preciso.
ResponderEliminarMe encantó.